¿Se debe, o no, visitar los parques en medio de una pandemia? ¿Es seguro? ¿Hay tanta gente como antes? Esas son algunas de las preguntas que nos han hecho varias personas y queremos compartir con todos lo que hemos respondido.
Como muchas otras tantas cosas en este 2020, los parques han cambiado.
Todos los parques temáticos de Florida Central, la zona donde se encuentra Disney, SeaWorld y Universal Orlando, cerraron por el brote de coronavirus y reabrieron en medio de la pandemia.
El histórico cierre de casi cuatro meses (para algunos de los parques) llegó a su fin con estrictas medidas que buscan minimizar las posibilidades de contagio con coronavirus. Nótese que dije minimizar.
Desde la entrada algunos parques tienen avisos del riesgo de contagio que hay en cualquier espacio público en el que hay personas presentes. Y esto aplica a todas partes, no solo en los parques.

Este letrero, que advierte sobre el riesgo de exposición al coronavirus en cualquier lugar público donde hayan personas, se encuentra en la entrada del Centro de Transportación y de Venta de Boletos de Disney. Justo detrás, bajo la carpa, le toman la temperatura a todos los visitantes. (De Parque en Parque)
A lo largo de los parques, desde la entrada hasta en el interior de las tiendas, puedes ver decenas de letreros con recordatorios de que debes utilizar mascarilla, mantener la distancia mínima de seis pies de las otras personas y lavarte las manos frecuentemente.
En el caso de los parques de Disney sus medidas van desde el uso de mascarilla prácticamente en todo momento hasta la disminución de la capacidad de los parques. Menos gente, mayor espacio para mantener el distanciamiento social.
La compañía estableció un sistema de reservación para controlar la cantidad de personas que entra cada día en los parques y temporeramente disminuyó su oferta de entretenimiento para evitar aglomeraciones.
Las modificaciones son evidentes. Hay lavamanos portátiles estratégicamente ubicados, los dispensadores de desinfectante están a la entrada y a la salida de cada atracción, el plexiglás abunda y las marcas en el piso que recuerdan el distanciamiento social, e indican por donde debes caminar, están por todas partes.

Paneles de plexiglás dividen el área de espera para subir al vehículo que te pasea por Kilimanjaro Safaris en Disney’s Animal Kingdom. (De Parque en Parque)
Disney, incluso, estableció un grupo de empleados que rondan los parques vigilando que todos utilicen la mascarilla cubriéndose boca y nariz y mantengan el distanciamiento social.
Universal tomó medidas similares, pero a diferencia de Disney no hay que hacer reservación para visitar sus parques Islands of Adventure, Universal Studios y Volcano Bay. Aún así el volumen de personas que admiten diariamente es considerablemente menos que antes de la pandemia.

Empleado de Universal Orlando en la entrada de la atracción Flight of the Hippogriff con desinfectante de manos. (De Parque en Parque)
En los parques de Universal desinfectarse las manos no es opcional. Antes de subir a cada una de las atracciones un empleado echa desinfectante directamente en tu mano.
Además, por el parque tienen dispensadores automáticos con desinfectante para que los visitantes puedan tomarlo por sí mismos.
En SeaWorld también hay que hacer reservación para visitar el parque. Ahí siguen un protocolo parecido al de los demás parques aunque un tanto menos rígido que en Disney y Universal, según nuestra experiencia.
En sus estadios, que es donde más personas se suelen concentrar, tienen filas alternas cerradas. Al final de cada espectáculo los entrenadores piden a las personas que permanezcan sentadas para que los empleados del parque puedan dirigir el tráfico de personas por secciones hacia fuera del lugar de manera tal que puedan mantener el distanciamiento físico.

En todos los parques la dinámica para subir a las atracciones es prácticamente la misma. Subes acompañado de tu grupo (o solo, en el caso de que no tengas acompañante) y distanciado de otras personas. Por eso en la foto se ven tantos asientos vacíos. (De Parque en Parque)
En todos los parques, desde las transacciones de pago hasta la manera de ordenar comida se realizan preferiblemente con tarjetas de crédito o débito y utilizando las aplicaciones de cada parque. El punto principal es que mientras menos contacto físico haya, mejor.
La limpieza y desinfección de las áreas más transitadas y las atracciones ha incrementado notablemente.
Hasta el momento, en otros lugares en los que he estado no he visto tantas medidas y esfuerzos para mantener el lugar tan seguro.
En términos generales diría que si te sientes cómodo yendo al centro comercial, al cine o comiendo en el interior de restaurantes, puedo decir que con toda probabilidad te vas a sentir seguro en los parques.